La fuerza del Ramakien se entiende mejor si tenemos en cuenta que a los seres humanos nos gusta pensar sobre nosotros mismos mediante relatos. A través de ellos nos situamos en el mundo y damos forma a nuestra sociedad. Y no sólo esto, sobre estas narraciones se construyen más tarde una buena parte de nuestras creencias personales y costumbres, es decir, nos mueven a la acción.
Los grandes relatos míticos constituyen una parte fundamental de la historia sagrada de los pueblos.
Camino de Lanka, lugar donde la princesa Sida permanece secuestrada, se pondrán a prueba las cualidades y temperamentos de los distintos personajes en su lucha contra los partidarios de Tosakan.
Así, el propio príncipe Phra Ram tendrá múltiples ocasiones para mostrar las virtudes propias del rey ideal, como son el sentido de la justicia, la lealtad y la compasión.
En los distintos episodios aparecen seres humanos y también mitológicos, como es el caso de Hanuman, general de un ejército de monos, fiel y valiente aliado de Phra Ram, con gran protagonismo en la versión tailandesa.
Veamos un par de ejemplos.